Como ya os había contado hace unas semanas estuve de viaje en Alemania visitando a una amiga muy querida que este año esta viviendo allí. Concretamente estuve en Stuttgart. La ciudad posee dos universidades, escuelas técnicas y es sede de varios institutos de investigación, como el Centro Aeroespacial Alemán (DLR), el Fraunhofer o el Max Planck.

Stuttgart es la puerta de entrada a la Selva Negra. Rodeada de colinas, bosques y viñedos que llegan hasta el centro. El puerto se sitúa al noreste de la ciudad, a orillas del río Neckar.

Es una ciudad muy tranquila que tiene muchas fuentes y parques por los que pasear.

En primavera es una de las mejores épocas para visitar Alemania porque no hace mucho frío por el día, aunque por la noche refresca bastante, pero el calor es muy suave.
No hay casi sol y es muy gris todo, siempre está nublado y no sabes si es porque va a llover o no.

Lo que es el centro de la ciudad no es muy grande y en un día se puede ver.
Antiguo palacio:

Al lado del antiguo palacio hay una pequeña plaza donde está la estatua de Schiller, uno de los autores alemanes más importantes:

Ayuntamiento:

Ópera:

Nuevo palacio:

Plaza donde está el nuevo palacio:

Catedral: 

Para terminar el día después de haber estado paseando es muy bonito ir al edificio de Mercedes- Benz y subir a la terraza, arriba del todo, desde donde se pueden ver unas vistas espectaculares de toda la ciudad y desde donde se divisa la torre de comunicación que fue la primera de Europa.

Otro día hay que ir a visitar Tübingen, esa a una hora en tren de Stuttgart, es una ciudad más pequeña y es sobretodo residencial y de estudiantes pero es preciosa. Como un cuento con sus casitas y su mercado en la calle.

Lo más bonito es el río Nekar y la plaza central:

También hay que visitar el castillo:

Escaleras para subir al castillo, hay muchas pero las vistas y el entorno lo merecen:

Para despedirse de Alemania nada mejor que probar uno de los platos típicos de esta región, Maultachen en «Flora y fauna» un sitio de allí muy típico, está al lado de un lago precioso por el que después podéis pasear.

El Maultachen es como si fuese un ravioli pero más grande y con más relleno. Este es de carne y verduras y va acompañado de puré de patata.

Besos, Irene.