Esta receta es del siglo XVII, se realizó por primera vez en un obrador francés y son los primeros macarons que se hicieron cuando todavía no existían los colorantes alimentarios que llevan hoy en día todos los macarons.
La receta original son unas galletas más grandes pero yo las hice pequeñas, tipo pastas de té para disfrutar de un bocado.
Es una receta SIN GLUTEN Y SIN LACTOSA con un sabor delicado, muy fácil de hacer y con pocos ingredientes pero el truco es conseguir una harina de almendra de alta calidad, si la almendra es marcona mucho mejor.
Con esta receta salen 30 galletas pequeñas.
INGREDIENTES:
⁃ 7g miel
⁃ 54g Azúcar blanco
⁃ 125g harina de almendra cruda
⁃ 1’5 claras de huevo
⁃ 54g Azúcar glasé
ELABORACIÓN:
1- Precalentar el horno a 175°C. Mezclar la harina de almendra con los dos tipos de azúcar y la miel.
2- Añadir la mitad de las claras y una vez integradas añadir el resto. Terminar de integrar durante medio minuto.
3- Escudellar, sobre papel vegetal o un silpat, con una manga y boquilla lisa pequeñas porciones. Dejar secar 20 minutos a temperatura ambiente sin tapar.
4- Hornear durante 20 minutos aproximadamente, hasta que estén doradas por arriba. Tienen que quedar blandas por el centro y crujientes por fuera.
Besos, Irene.